Marcelo Vieira es, para muchos, una de las piezas claves para que el Real Madrid remonte el vuelo en lo que queda de temporada. Su lesión (rotura de un dedo) a principios de curso con Brasil provocó un grave problema para el conjunto blanco y su técnico, José Mourinho.
En primer lugar, porque su ausencia, unida a la de Coentrao, hizo que tuviera que improvisar, día sí, día también, una defensa que ha hecho aguas en partidos clave, como el doble enfrentamiento europeo contra el Borussia Dortmund, o las derrotas contra Betis y Sevilla, sin ir más lejos.
Además, Marcelo también le ha quitado al Real Madrid un arma valiosa en ataque. Su forma anárquica y a la vez efectiva de asomarse a los costados del equipo merengue provocaba alerta y revuelo en las zagas rivales, algo que solía aprovechar su 'ex amigo' Cristiano Ronaldo, tumbado habitualmente a su banda, la banda izquierda.
El pasado 12 de enero, sin embargo, llegaron buenas noticias. Marcelo entró por primera vez en una convocatoria, la del choque que los blancos jugarían contra Atlético Osasuna en Pamplona. El brasileño, como era de esperar, no jugó, pero sí lo hizo al siguiente partido, frente al Valencia, y en Copa. Mourinho dio la sorpresa y alineó al 12 merengue de inicio.
Su participación fue la esperada. Subió la banda, desaborló el costado derecho de la zaga ché y, de paso, impidió los ataques valencianistas por ese lado. Sin embargo, la gasolina le duró poco. Apenas 45 minutos. Fue sustituido al descanso por Coentrao.
Desde entonces, y después de tres partidos, Marcelo no ha a aparecer por el césped vestido de corto. Mourinho no lo ve preparado. No está en forma. O mejor dicho, tiene algo de sobrepeso, según la Cadena Cope. El cuerpo técnico del Real Madrid cree que su futbolista podría jugar sin problemas atendiendo al estado de su dedo, pero consideran que necesita más minutos para ir perdiendo lastre y cogiendo forma.
De ahí que, desde el 12 de enero no haya jugado. Y lo más probable es que, salvo sorpresa, no lo haga tampoco este miércoles contra el Barça. Y eso que el futbolista ha cuajado buenos partidos frente a los culés. De hecho, el último choque antes de lesionarse fue precisamente en el Camp Nou. Lo normal es que Mourinho alinee a Arbeloa y Essien en los laterales ante las ausencias de Coentra y Sergio Ramos en defensa.
No es la primera vez que Marcelo tiene este tipo de problemas. Ya en 2011, el brasileño fue señalado por el Real Madrid, junto con Benzema, por tener problemas con su peso, algo que, tras la inactividad de la lesión, ha reaparecido.
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