El Real Madrid atraviesa un momento delicado. Los resultados globales de la temporada desvelan más sombras que luces. Cierto es que en la Supercopa y la Champions, los de José Mourinho han dado una cara más cercana a la que se vio el pasado curso, pero en la Liga los blancos sestean a ocho puntos del Barça con una preocupante carencia de pegada, forma y fútbol.
Muchos son los análisis que están surgiendo sobre los porqué de este paso atrás. Algunas miradas apuntan a José Mourinho como el causante de la crisis. Las escasas rotaciones, los planteamientos defensivos o los conflictos internos son algunos de los argumentos usados contra el técnico blanco.
Sin embargo, los problemas del Real Madrid también tienen nombre y apellidos. Algunos jugadores están dando una versión más pobre de lo esperado y eso, más allá de la figura del entrenador, está lastrando también el rendimiento merengue. Hombres como Cristiano Ronaldo e incluso Casillas ya han sido señalados.
Sin embargo, es el bajón en tres pilares básicos de la última temporada lo que más están mermando las capacidades merengues. Benzema, Xabi Alonso y Sergio Ramos parecen la sombra de aquellos jugadores que deslumbraron al planeta fútbol hace apenas unos meses.
Benzema: sin gol, ni velocidad
El caso del galo es quizá uno de los más sorprendentes. Indiscutible para Mourinho la pasada temporada, en la presente apenas está contando para el portugués. Su rendimiento sobre el césped viene a demostrar el por qué de esta decisión. Su tanto al Manchester City fue, de hecho, el primero en lo que llevamos de temporada.
A estas alturas, el curso pasado, Benzema ya había logrado en el mismo número de partidos tres tantos que se dispararon hasta los siete a principios de noviembre pese a la lesión que lo apartó del equipo durante buena parte de octubre. Una aportación, la de los goles, que se unió a la técnico-táctica que ponía en liza jornada tras jornada. Tras haber perdido peso, el 9 blanco se convirtió en un generador de espacios y asistencias del que todo el equipo se benefició.
Sin embargo, este año, su presencia en el juego colectivo se está reduciendo durante los escasos minutos que juega sobre el terreno de juego. No está fino físicamente y eso se nota en su rendimiento. José Mourinho lo señaló , junto con Sergio Ramos de ser los dos futbolistas con peor rendimiento en la pretemporada merengue. De ahí una suplencia en la que también ha influido el alejamiento de Zidane del arutina.
El ex futbolista ha dejado de ser el director deportivo del primer equipo para ocuparse de la cantera blanca en una decisión de Mourinho que Karim no ha encajado bien. Zizou se había convertido en algo más que un apoyo para dar su mejor versión.
Xabi Alonso: agotado y desasistido
Xabi Alonso fue el año pasado timón y ancla del Real Madrid. En torno a él giraba todo el equipo y él se ocupaba de moverlo a su antojo con un repertorio de pases, control y movimientos que le hizo imprescindible para José Mourinho.
El luso, sin embargo, lo 'sobreexplotó'. Sin apenas descanso, el tolosarra lo disputó todo la pasada temporada. Una sobrecarga de partidos que se agravó con la Eurocopa. Sin apenas tiempo para coger fuerzas, la carga que tiene en sus piernas (y su cabeza) se deja notar.
Para colmo, el funcionamiento del resto del equipo no le ayuda. Las ayudas desaparecen a su alrededor. Por ello debe retrasar su posición y multiplicar su presencia en la medular. Demasiado esfuerzo.
Para colmo, todavía no tiene una pareja de baile fijo. Primero fue Lass, luego Khedira y más tarde Essien. Todos ellos han jugado a su lado sin descargarle del trabajo creativo que está acostumbrado a hacer. Sólo la presencia de Modric ante el Granada le dio cierto respiro en tareas productivas.
Ramos: discutido por Mourinho
El de Camas se ha convertido en el último gran debate abierto del madridismo. Su suplencia en el duelo frente al City ha estado propiciado por cuestiones extradeportivas, pero también esconde asuntos puramente futbolísticos para José Mourinho. Tal y como hemos comentado antes, el luso lo acusa de una mala pretemporada. Para colmo, lo señala en la mayoría de jugadas que, a balón parado, se han convertido en sangría para la zaga blanca.
Ante Getafe y Sevilla, 'The Special One' cree que no cubrió bien los espacios y que eso terminó costándole goles caros a un Real Madrid que no está para conceder favores al rival. Más allá de este punto, lo cierto es que el andaluz no está tan rápido como lo estaba la temporada pasada.
Frente al Barça, en el Camp Nou y el Bernabéu, sufrió mucho con los balones que entraban a la espalda. De hecho, la entrada de Pepe tras su lesión lo ha reforzado y mejorado cuando, el curso pasado, fue al revés: el portugués fue el beneficiado de la presencia de Ramos en el puesto de central.
Su salida de balón tampoco está siendo lo clarividente que pudimos ver el año pasado. El propio Pepe está asumiendo funciones de sacar el esférico de la cueva, lo que supone, en ocasiones, pelotazos que acaban en pies del rival. El curso pasado estas alternativas parecían impensables ante un Ramos imperial que solía encontrar siempre la solución ideal para dar movimiento a la creación merengue.
Entidades
Sergio Ramos
Jugador del Real Madrid CF
Xabi Alonso
Centrocampista del Bayern de Múnich
Tres fichajes sorpresa
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