
El Real Madrid ha vuelto este lunes al trabajo y lo ha hecho con la mente puesta en los fichajes. Para ello, antes, hay que dejar salir. Kaká, Lass, Carvalho y Gago son los cuatro futbolistas elegidos por José Mourinho para decir adiós a la casa blanca. Su venta podría suponer la llegada de Luka Modric y Maicon.
Sin embargo, ambas operaciones se encuentran enquistadas. El Real Madrid prepara, como siempre, un plan B que presentar como alternativa, aunque, en esta ocasión podría tener un rumbo diferente al de otras temporadas. Los merengues se plantean, por primera vez en mucho tiempo, no fichar a ningún jugador en caso de que no salga sus primeras alternativas.
Dicho de otro modo: Mourinho considera que con lo que tiene ahora mismo es más que suficiente para afrontar la próxima temporada. Incluso la salida de los anteriores descartes no debilitarían en demasía la plantilla. Sólo las bajas de Lass y Kaká podrían resultar más sensibles.
El primero, porque es el único posible lateral derecho con el que cuenta tras el adiós de Carvajal y Altintop. El segundo, porque es es el único mediapunta disponible tras Özil.
Sin embargo, aún incluso con estos análisis, la plantilla blanca, dice Mourinho, está suficientemente bien armada.
¿Que un día no puede contar con Arbeloa y no está Lass? Sergio Ramos puede volver al lateral. Varane y Albiol son jugadores de garantía para jugar en el centro de la zaga en lugar del de Camas.
¿Que hay que dar descanso a Özil? Higuaín, Di María, Callejón, Sahin, Granero e incluso Morata pueden dar variaciones tácticas que tapen su ausencia.
La tranquilidad blanca es, así pues, extraordinaria. Hacía mucho tiempo que el panorama no estaba tan tranquilo en el Bernabéu en lo que a fichajes se refiere. De hecho, esta es una de las armas que los blancos pretenden usar, fundamentalmente en el caso de Modric.
Si el Tottenham se niega a vender, paciencia. Las prisas se quedarán en Londres, son ellos, los 'spurs' los que tienen un 'problema' con un jugador que quiere irse y la necesidad de ingresar dinero para comprar los futbolistas que reclama Vilas-Boas.
Situación de calma y paciencia que, con el croata, se multiplica por dos debido al rol que tendrá y el precio exhibido. El croata será suplente en el Real Madrid. Llegaría, en todo caso, para suplir a Özil. Así pues, no corre prisa tratar de hacerse con un no-titular, más si lo demandado es de casi 40 millones de euros. A ese precio el Real Madrid no moverá ficha. Como mucho, 35 fijos más variables. De ahí no se moverán.
Con Maicon ocurre algo similar. El precio que pide el Inter y las dudas que ofrece el jugador generan demasiadas interrogantes en los directivos y en el propio Mourinho que, ante la escasez del mercado de laterales derechos, podría optar por no fichar nada.