Hace un año, Fernando Torres se convirtió en el fichaje más caro de la historia del fútbol inglés. Hoy, 365 días después de aquello, va camino de convertirse en el mayor fiasco en los últimos años de la Premier League. El delantero madrileño cumple su primer aniversario vestido de 'blue' Chelsea con un bagaje más que pobre que le acerca a su adiós de la Selección Española en la próxima Eurocopa de Ucrania y Polonia.
Negar la mayor sería una quimera. Hasta el propio Vicente del Bosque se lo ha advertido de manera soterrada: sólo los mejores irán a la cita del mes de junio. Y hoy por hoy, Torres no está en esta selecta lista. Ni en la de los once elegidos para saltar al césped, ni en la de los 23 jugadores que defenderán 'La Roja' en centro-Europa.
Lo dicen sus números: apenas cinco goles en 12 meses como jugador del Chelsea suenan a números de jugador pequeño, de jugador menor. Llorente, Negredo, Soldado e incluso el lesionado Villa (no se sabe si llegará a tiempo) tienen, hoy por hoy, bastantes más papeletas para superar a 'The Kid' en la lista final.
El miedo a ser un 'retirado' más
Ésta, la de la Eurocopa, no es, con todo, la única prueba de fuego para el jugador rubio que revolucionó durante cuatro años el Liverpool con 91 goles en 149 partidos. El jugador quiere volver al nivel de antaño para no perderse en una espiral de pesimismo que le retire de los terrenos de juego aún con las botas puestas. No quiere convertirse en otro Kiko. En otro Raúl.
No quiere ser otro delantero inútil antes de tiempo. ¿Cómo hacerlo? La respuesta simple habla de marcar más góles. La compleja apunta a adaptarse a un Chelsea que juega totalmente distinto a lo que a él le gusta.
Lo suyo es trotar al contragolpe, no esperar a que le llegue la pelota en una posesión eterna, como parece proponer en los últimos meses Vilas-Boas. Por eso brilló en Anfield o en el Atlético de Madrid. Por eso se hizo grande con España.
En medio del juego del 'tiqui'-'taca', Torres era la cara más visible del plan B en Luis Aragonés. Así llegó su gol a Alemania en la final de la Euro 2008: pase en profundidad de Xavi y carrerón de 35 metros en los que demostró sus mejores armas. Velocidad, potencia, inteligencia y precisión. Así es Torres y así nunca brillará, al menos en este Chelsea y con este estilo.
Su posible retorno al Atlético de Madrid (se habla de cesión) o su marcha a algún otro equipo inglés más ajustado a sus características son algunas de las vías abiertas a la esperanza
El hasghtag #EnElUltimoGolDeTorres
Mientras tanto, las redes sociales se mofan de Torres. En Twitter, el hasghtag #EnElUltimoGolDeTorres está triunfando con muchos más mensajes de críticas al estilo de juego de delantero que a sus virtudes. Esa fecha, la de su último gol, fue el 19 de octubre, en la goleada del Chelsea (5-0) al Genk en Champions League. Aquel día hizo doblete
Antes, Swensea, Manchester y Aston Villa sufrieron los únicos zarpazos del 'Niño' en su etapa como delantero blue. Un año después, Torres sigue sin hacerse mayor en su aventura más importante.