Enfado gigantesco. Enfado que no huele a pose. Sabe a realidad pura y dura. Kun Agüero y sus agentes ocultan cada vez menos su gigantesco enfado con Florentino Pérez y el Real Madrid por lo que ellos consideran "una traición" al jugador y a la empresa de representación IMG. Los blancos les prometieron lanzarse a por su fichaje y a medio camino, les han dejado en la estacada apostando por la opción Neymar.
Según informa la Cadena Cope, las declaraciones en privado del entorno del argentino son cada vez más agresivas. En público prefieren guardar silencio y ser comedidos.
Por lo que pueda pasar y porque no les interesa promocionar la realidad: el Kun estaba (y todavía está) loco por jugar en el Real Madrid. Si ahora la situación le obliga a quedarse en el Atlético, semejante confesión sería un gigantesco lastre en su carrera. Los colchoneros nunca se lo perdonarían.
Posible pacto en enero
La película de los hechos habla de un posible pacto previo entre Real Madrid y Kun a mediados de enero, fechas en las que el propio club blanco preguntó a Miguel Ángel Gil Marín, consejero delegado de los rojiblancos, si podían fichar a Agüero. "No vendemos. Si lo queréis, habrá que pagar la cláusula", respondió.
Según filtran fuentes del Santiago Bernabéu, el club decidió lanzarse a por el jugador e intentar atarlo antes de que llegara el verano. Fue entonces cuando se llegó a un pacto previo. Estas mismas fuentes no aclaran si se trató de un pacto verbal o de si incluso se llegó a firmar un documento entre ambas partes.
Los pasos para ser jugador blanco
Sea como fuere, el Kun habría decidido entonces su futuro: ser delantero del Real Madrid. A partir de ahí, llegarían los típicos pasos para que un galáctico acabe en Chamartín:
1.- El jugador comunica al club su intención de irse
2.- El jugador se declara en rebeldía e insiste públicamente en su fichaje
3.- El club de origen del futbolista empieza a plegarse ante las presiones.
4.- Interviene el Real Madrid para empezar a pedir precio y a sondear opciones
5.- Arrancan las negociaciones entre ambas entidades para sacar al jugador por menos de lo que cuesta la cláusula y a través de un acuerdo no agresivo.
6.- El jugador (en este caso Agüero) termina vistiendo de blanco.
Sin embargo, en este culebrón, todos los pasos se han detenido en el punto número cuatro: no ha habido presión alguna del Real Madrid.
Es más, cuando más estaba presionando Agüero, con referencias personales incluso a Miguel Ángel Gil Marín ("Él no decidirá dónde jugaré", dijo Kun), los blancos y Florentino Pérez cambiaron de rumbo para centrarse en Neymar.
Sin alternativas de futuro
Es aquí donde radica el enfado del argentino y sus agentes. Creen que se les ha traicionado porque no se ha apostado por él. Le han dejado vendido, casi semidesnudo ante la tormenta.
Si el Real Madrid ficha a Neymar, mucho se teme Agüero que él ya no interesa. ¿Qué hacer entonces? No hay clubes que hayan ofrecido mucho por él. Tan sólo la Juventus, alternativa vacía, llena de millones de euros, pero sin perspectivas deportivas (no jugará en Europa este año).
Irse a Turín sería un paso atrás, pero quedarse en el Calderón sería un suicidio. La afición nunca le perdonaría semejante ataque de madridismo. Allí siempre sería un defenestrado.
Encrucijada entre la espada y la pared que Agüero no esperaba. Él lo dio todo para fichar por el Real Madrid pero éste no le siguió la jugada. De ahí el enfado de un crack mundial que se siente traicionado en lo más profundo de su orgullo.
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