Tras finalizar la ida de semifinales de Liga de Campeones en el Bernabeu, con la derrota del Real Madrid por 0-2 ante el Barcelona, el entrenador local José Mourinho dio una rueda de prensa en la que acusó al Barcelona de tener a los árbitros a favor en la Liga de Campeones, en contra de lo que le ocurre al Real Madrid. Y dio ejemplos concretos.
El escándalo de Stamford Bridge
El 6 de mayo de 2009 en las semifinales de la Liga de Campeones entre el Barcelona y el Chelsea , el conjunto catalán visitaba Stamford Bridge tras el 0-0 de la ida en el Camp Nou. El Chelsea se adelantó en el minuto 9 con un gol de Essien y el Barcelona no conseguía anotar en la meta defendida por Peter Cech. El Chelsea reclamó hasta cinco penaltis no pitados por el árbitro del encuentro, Tom Henning.
En el minuto 93, con el partido prácticamente acabado, Iniesta se convirtió en el héroe del barcelonismo al conseguir empatar el partido y pasar a la final por el doble valor de los goles fuera de casa. Mourinho se refirió a este partido como "el escándalo de Stamford Bridge" y aseguró que le daría verguenza ganar una Champions así.
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El Arsenal, con diez
Esta temporada, el Barcelona se enfrentaba al Arsenal inglés en los octavos de final de la competición europea. A pesar de adelantarse en el marcador, el Barça cayó por 2-1 en la ida en Londres y le tocaba remontar en el partido de vuelta. En el minuto 56, con el marcador 1-1 tras goles de Messi y Busquets en propia puerta, el Ársenal se quedó con diez. El árbitro del encuentro Massimo Busacca enseñó la segunda amarilla a Robin Van Persie por disparar a puerta cuando la jugada estaba invalidada por fuera de juego.
Con el reglamento en la mano, desplazar el balón cuando el árbitro ha parado el encuentro es amarilla. Sin embargo, en la práctica esta norma se aplica muy pocas veces, lo que provocó el enfado y la polémica por la acción.
El penalti de Gourcuff
En esa misma ronda, octavos de final, el Real Madrid se enfrentó a Olimpique de Lyon. El partido de ida en Lyon fue arbitrado por el mismo colegiado que el último clásico en el Bernabeu, el alemán Wolfgang Stark, quien no pitó un claro penalti a favor del Madrid por mano dentro del área del jugador francés Gourcuff. Ese día ya se quejó Mourinho del alemán "Estoy enfadadísimo, el árbitro debió ver el penalti", al igual que repitió el miércoles en el Bernabeu.
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Una sanción inédita