
Este sábado se cumple una década de la presentación de Luis Figo como jugador del Real Madrid. Fue la 'bomba' del verano de 2000, que 'estallaba' pocas horas después de que Joan Gaspart ganara las elecciones a la presidencia del FC Barcelona a Lluís Bassat.
Hacía tiempo que se hablaba de que el portugués podía ser la gran sorpresa del verano si Florentino Pérez ganaba las elecciones a la presidencia del Real Madrid. El aspirante a destronar a Lorenzo Sanz así lo había prometido en su campaña y la 'guerra' se desató el 5 de julio, cuando se filtró por vez primera la noticia, según cuenta el diario Sport.
Figo hacía tiempo que se había comprometido con la candidatura de Florentino siempre y cuando éste llegara a la presidencia del club, sin embargo parecía difícil que se fuera a pagar la cláusula del jugador que era de 10. 270 millones de pesetas (61,7 millones de euros) y, además, se consideraba a Figo un jugador muy identificado con el club quwe incluso en algunos partidos había lucido el brazalete de capitán.
Seguramente Figo y su agente, José Veiga, nunca contemplaron la victoria de Florentino en las urnas, pero al consumarse, no hubo marcha atrás. Habían dado su palabra. Y la cumplieron.
El lunes 24 de julio de 2000, Figo era presentado en Madrid, consumándose así una traición histórica. El jugador, que no se sentía lo suficientemente valorado en el Camp Nou, aseguró que se había ido por culpa de los directivos, que a su juicio se lo habían "puesto muy fácil" porque no atendieron sus peticiones. No lo hicieron, aunque luego Gaspart le igualaría la oferta del Real Madrid, porque había un vacío legal en la entidad, metida de lleno en un proceso electoral...
Figo, junto a Florentino y Alfredo di Stéfano, en la presentación, aseguró que "tenía claro que iba a jugar en el Real Madrid" y que tenía "la conciencia muy tranquila". También tuvo palabras para la afición barcelonista, de la que dijo que "siempre me trató muy bien?.
Y en cuanto al futuro que le esperaba cuando se encontrara con su ex equipo en el campo comentó: ?Las cosas no serán fáciles por la rivalidad que existe entre ambos equipos, pero deseo ser tan feliz en Madrid como lo he sido estos años en Barcelona?.
Las reacciones desde la Ciudad Condal no se hicieron esperar y la primera partió del recién elegido presidente del FC Barcelona, Joan Gaspart: "El que la hace, la paga".
Dijo que Florentino había estirado demasiado la cuerda y que ésta se había "roto" y aseveró que "aunque no conozco el documento firmado entre Veiga y Florentino, es una inmoralidad".
Y fue más allá: "El Real Madrid se ha quedado con un jugador que no siente los colores?. Agregó que "intentaré tener buenas relaciones con el Real Madrid, pero no olvidaré lo que Florentino ha hecho".