La situación de Zlatan Ibrahimovic en el Barça es realmente complicada. A su mal bagaje deportivo se le ha unido la polémica foto en la que aparece en una postura muy cariñosa junto a su compañero Gerard Piqué. ¿Existe relación entre ambas situaciones? Los precedentes del 'caso Ibra-Piqué'
Esta semana ha venido marcada por una instantánea más compleja de lo que parece. Los medios de comunicación han tratado el tema de forma simple, o mejor dicho, de la manera en la que iban a obtener un resultado más eficaz: más audiencia, más lectores o más 'clicks'.
Hay que echar un vistazo hacia atrás para intentar comprender los motivos por los que esa escena a la salida de un entrenamiento se plasmó en una fotografía que, ciertamente, puede deformar la realidad.
En verdad, Zlatan Ibrahimovic está atravesando una situación muy delicada. Llegó al Barcelona con la difícil misión de sustituir a una leyenda en la institución como es Samuel Eto'o. Su rendimiento ha ido en picado tras un comienzo esperanzador, y la presión se ha ido apoderando de su persona.
Poco amor para 'Ibra'
La foto está inscrita dentro de un contexto muy complicado para el jugador. Los rumores le sitúan fuera del club en junio, y lo último que le faltaba era que ahora acapare titulares en los medios... por un aspecto ajeno a su rendimiento.
Sin saber en qué consistía la conversación entre Piqué y Zlatan, hay 'indicios' claros. El rostro del sueco no es precisamente el de un jugador feliz. Muestra un claro agobio laboral, con una mirada abatida dirigida hacia el suelo y por ello Piqué, viendo el desánimo de 'Ibra', se acerca aún más y le anima de forma más efusiva: no quiere que su compañero se hunda más.
Para colmo, 'Ibra' respondió de mala forma a una reportera de Sálvame que lo único que pretendía era sacar un titular morboso. Lo de menos, qué duda cabe, es la tendencia sexual del delantero nórdico. Sin embargo, entre la foto y sus declaraciones lo que ha hecho es estar bajo 'sospecha', por un lado, y herir las sensibilidades de los colectivos gays.
El tema está siendo sacado de quicio. Los deportistas, de por sí, tienden a mostrarse muy efusivos, y no quiere decir absolutamente nada. Sin embargo, en época de crisis, a Ibrahimovic le gustaría que únicamente se hablara de su trabajo, para poder reducir su ansiedad y presión.
Una foto polémica
