Más allá de la eliminación que sufrió el Real Madrid en la Peace Cup ante la Juventus, el choque ante el conjunto italiano dejó una imagen: la durísima entrada que cometió el checo Grygera sobre Cristiano Ronaldo, y que hizo temblar al madridismo. Lo que pudo terminar en una gravísima lesión, acabó en un susto.
El Juventus-Real Madrid fue de todo menos un partido amistoso. La dureza con que fue afrontado por parte de los italianos, además del lamentable estado del terreno de juego, convirtió el choque entre dos históricos del fútbol europeo en un peligroso duelo, en el que hubo más dureza de la debida.
La 'culminación' llegaría en los últimos momentos del partido, cuando el checo Zdenek Grygera le clavó la plancha a Cristiano Ronaldo a la altura de la rodilla. Por fortuna, la articulación del luso no cedió, pero quedó tendido en el matrecho césped del Sánchez Pizjuán, haciendo inequívocos gestos de dolor.
Ya en el tiempo de descuento llegaría el alivio para el madridismo, cuando CR9 volvió al campo, aunque cojeando. Los 96 millones que se pagaron por su contratación estuvieron a punto de convertirse en un terrible escalofrío para Florentino Pérez.