
Era cuestión de tiempo que llamarse fondo de inversión y apellidarse inmobiliario resultara un problema en un contexto, como el actual, de crisis financiera e inmobiliaria. Al final ha pasado. Los fondos inmobiliarios han decidido hacerle la competencia a los hedge funds en la lista de grandes perjudicados.
El pánico de los inversores ha provocado que cada vez sean más los fondos inmobiliarios que se han visto obligados a cerrar sus ventanas de liquidez (periodos donde se permite al inversor reembolsar sus activos) para frenar más huidas.
Pérdida de activos
Credit Suisse, Morgan Stanley, UBS, Axa, Aviva Investors son algunas de las gestoras que han optado por cerrar la ventana tras perder más del 20% de sus activos en tan sólo unos meses. Un grupo al que se han unido recientemente Degi, con el cierre durante tres meses de dos de sus fondos Degi Europe (que se comercializa también en España) y Degi International; y New Star, anunciando el cierre temporal de su fondo inmobiliario New Star International Property Fund, con el objetivo de "restaurar la suficiente liquidez al fondo para poder hacer frente a los reembolsos una vez se reabra".
Con esta medida, las gestoras tratan de evitar que se escapen más gatos o, en el lenguaje financiero, más liquidez; lo que les obligaría a vender inmuebles a precios irrisorios para poder hacer frente a los reembolsos, con los perjuicios que esto podría provocar para los inversores que decidan quedarse.
En España, de momento, sólo BBVA (BBVA.MC), con su fondo BBVA Propiedad, ha decidido tomar esta decisión. De hecho, anunció a sus inversores que durante el mes de noviembre tenían que tomar una decisión: o salir del fondo sin pagar comisión de reembolso alguna o de lo contrario, deberían permanecer en él durante al menos dos años. El objetivo, el mismo que repiten todas las gestoras: que los reembolsos de los que se van no perjudiquen a los que se quedan.
Desde el Santander (SAN.MC) aseguran que "de momento" no se plantean esta opción para su fondo Santander Banif Inmobiliario, con más de 4.000 millones de euros en patrimonio. Aunque sí han decidido liquidar su otro fondo inmobiliario, Habitat Patrimonio Inmobiliario, que en el momento del anuncio gestionaba tan sólo 12 millones de euros.
Junto a los de BBVA y el Santander, en España se comercializan otros ocho fondos de este tipo. Todos ellos, salvo el del BBVA y Grundbesitz Europa, gestionado por la alemana Rreef Investment, acumulaban a cierre del mes de octubre rentabilidades positivas en 2008. Por ejemplo, Caixa Catalunya Propietat se anota un 3,82%; Sabadell Inmobiliario, un 1,18%; y AC Patrimonio Inmobiliario, un 2,45%.
Los motivos
Pero, si están en positivo, ¿por qué los inversores retiran su dinero? "La razón que ha podido llevar a los partícipes a deshacer posiciones es precisamente que identifican todo lo que ahora lleve la palabra inmobiliario como de alto riesgo. Y por lo tanto el miedo y la desconfianza, provocado realmente por el desconocimiento, es el factor que conducen esos reembolsos", afirman fuentes del sector.
Y es que, a diferencia de lo que se piensa, los fondos inmobiliarios no invierten en empresas inmobiliarias que cotizan en bolsa -éstos son los fondos inmobiliarios indirectos- sino que están obligados a invertir en inmuebles que se destinen luego al mercado del alquiler.
Al estar su cartera compuesta de activos tan ilíquidos como éstos, ofrecen sólo ventanas de liquidez de manera trimestral, y no diaria como el resto de los fondos de inversión. Pero ni siquiera esta ventaja les ha permitido hacer frente a los reembolsos este año. Sólo en España, éstos han ascendido a 602 millones de euros, según Inverco.