Se busca a Philip Falcone. ¿Lo conoce? ¿No? Pues es el principal inversor a la baja del mercado español. A través del hegde fund Harbinger Capital Partners Master Fund, este inversor espera a que caigan las acciones de BBVA, Banco Popular y Santander. Esta sociedad está dirigida por Falcone, que consiguió a principios de año colarse en la lista de Forbes, ya que tiene un patrimonio de más de 1.700 millones de dólares.
Falcone ha hecho carrera en la industria de fondos entrando en compañías en una delicada situación financiera y negociando bonos basura -un tipo de renta fija con alto riesgo y elevada rentabilidad-. A sus 45 años, Falcone, licenciado en Económicas por la Universidad de Harvard, tiene un nombre de prestigio en la City londinense ganando dinero gracias a la crisis subprime -hipotecas basura-.
Y es que no sólo se ha posicionado a la baja en la banca española, sino que, además, tenía grandes inversiones en HBOS, que acabó en manos de Lloyds (aunque ambas han sido ahora rescatadas por el gobierno británico) y que llegó a desplomarse más de un 80% este año. De hecho, fue acusado de agravar la caída de las cotizaciones de las entidades británicas con sus operaciones. Las autoridades de EEUU y Reino Unido prohibieron temporalmente las operaciones "de venta a corto" por considerar que contribuyen a la especulación y pueden perjudicar seriamente a los valores sobre los que se producen.
Ahora, Falcone posee más de 544 millones de euros invertidos en tres de las principales entidades españolas. Su negocio de previsión a la baja en el Santander (SAN.MC) se compone de 24,5 millones de acciones, que suponen el 0,39% del capital social del banco cántabro y están valoradas en 252 millones de euros, según el precio de cierre de mercado. Por ahora los títulos de la entidad presidida por Emilio Botín caen un 30,49%.
En el Banco Popular (POP.MC), la "posición corta" de Harbinger afecta al 0,65% del capital de la entidad presidida por Ángel Ron a través de 7,88 millones de acciones con un valor conjunto de mercado de 62 millones de euros, aunque a finales de septiembre llegó a controlar más de un 1,65%. Este banco ya se deja un 31,9% en el año. Por último, también está en BBVA (BBVA.MC), con un 0,56% del capital, es decir 21 millones de títulos. El banco azul se comporta también peor que el Ibex 35: cae un 34,79%, frente al 29,52% del índice.
Pero, ¿qué ha hecho Falcone para ser ahora el inversor menos querido de la banca española? Empezó su carrera en Barclays a finales de los años noventa como responsable de los bonos de alta rentabilidad y alto riesgo (bonos basura). Tras más de ocho años en ese área creó por su cuenta el fondo Harbinger Capital Partners Master Fund, que ahora tiene bajo gestión más de 2.800 millones de dólares.
Su estrategia es similar a la que sigue Paulson&Co, el hedge que se anticipó a la crisis de las subprime y consiguió revalorizarse más de un 100% cuando ésta estalló. Consiste en tomar posiciones agresivas con tácticas muy variadas como el préstamo de valores, venta a descubierto y derivados. Lo que hace es vender los títulos en mercado, se ingresa ese dinero y espera a que bajen para que recomprarlas más baratas. También vendía acciones que no poseía para comprarlas a un mejor precio.
Los otros pecadores
Pero no es el fondo de inversión libre de Falcone el único que ve con malos ojos el sector bancario español. Comparte protagonismo con otros hedge funds que, como él, también han querido sacar partido a las caídas de la banca española. Desde que la CNMV obligó a comunicar todas las posiciones cortas que se tomaran en los bancos españoles, un total de diez fondos han anunciado que invierten a corto en varios valores financieros españoles.
Tras Falcone, el más activo ha sido Amber Master Fund, que ha comunicado que tiene un 1,17% invertido a la baja en Banco Popular. El banco presididio por Ángel Ron, es sin duda, el que mayor desconfianza genera entre los gestores de fondos. No en vano, seis de los diez fondos que han declarado posiciones bajistas en las finanzas españolas tienen su objetivo en esta entidad. Es el caso de de Landsowne, que tiene un 0,77% invertido a corto, Tiger Global Management (0,33%), Amber Master Fund (1,17%) o Virkin Global (0,33%). Tampoco Bankiter o Sabadell se han salvado de ser la diana de las inversiones a la baja. Calypso Capital o Blue Ridge Capital han comunicado posiciones bajistas en ellos.