El fabricante de hemoderivados obtuvo un beneficio neto de 28,4 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que representa un incremento del 5,2% respecto a los mismos meses del año pasado. Grifols explica que si se hubiera eliminado el impacto de la amortización de acciones sin derecho a voto en el mes de mayo, el crecimiento del beneficio neto hubiera ascendido al 41%. En cuanto a su facturación, creció un 24%, hasta situarse en 482 millones de euros.