Las bolsas de valores chinas cerraron la última sesión de 2008 con una pérdida del 0,66% antes de las vacaciones de Año Nuevo y con un volumen de negocio bajo, tan bajo como la confianza de los inversores chinos en su peor año.
El índice referencial de Shanghai cayó un 0,66%, o 12,10 puntos, para situarse en 1.820,81. Mientras que el parqué de Shenzhen sufrió una caída aún más pronunciada, del 1,11% o 72,65 puntos, y bajó hasta los 6.485,51 enteros.
El volumen combinado de ambas bolsas fue de 55.000 millones de yuanes (8.000 millones de dólares estadounidenses, o 5.670 millones de euros), por debajo de los 60.000 millones de yuanes negociados ayer, martes.