Un ataque de la disidencia de los antiguos rebeldes en Costa de Morfil a una carcel ubicada en la ciudad norteña de Bouake se saldó con centenares de presos huídos, según confirmaron fuentes militares, que atribuyeron el asalto a un intento por liberar a un compañero detenido.
Los testigos hablaron incluso de tiroteos, aunque ninguna fuente confirmó inmediatamente quién estaba realizando los disparos. En cualquier caso, el incidente demuestra la renacida inestabilidad en al país africano después de que el mes pasado se registrasen enfrentamientos con el movimiento Fuerzas Nuevas, un antiguo grupo rebelde que controló el norte desde la guerra ocurrida entre 2002 y 2003.
"Asaltaron la prisión porque no estaban contentos con el arresto de uno de sus hombres. Fue un problema interno", admitió un portavoz de Fuerzas Nuevas. No aclaró, sin embargo, cuántas personas podrían haber quedado en libertad en una prisión que acoge a alrededor de 2.000 personas.