El presidente electo, Barack Obama, y su familia no podrán mudarse a la residencia de invitados de la Casa Blanca a principios de enero, como era su deseo, para que las hijas del futuro jefe de Estado comenzaran en el nuevo colegio, ya que las instalaciones están reservadas para otros eventos, según reconocieron varios asesores.
Las dos hijas de Obama y su mujer asistirán proximamente a la escuela privada Sidwell Friends, por lo que la familia quería adelantar la mudanza para antes de la toma de posesión, prevista para el 20 de enero. Habían solicitado trasladarse a la denominada Casa Blair, que se encuentra cerca de la Casa Blanca, en la Avenida de Pensilvania, como forma provisional.
Sin embargo, parece que la casa de invitados albergará distintos tipos de actos y recepciones y no quedará libre hasta el día 15, si bien la Casa Blanca se ha portado en todo momento de forma "amistosa" en las conversaciones respecto a un posible adelanto de la mudanza, afirmó un asesor del equipo de transición. Desde la Casa Blanca, una fuente también mostró la disposición de la institución en colaborar con la familia Obama en la medida de lo posible para coordinar los cambios y los actos previstos, lo que demuestra una vez más la aparente cortesía con que se están llevando a cabo los cambios en la Presidencia.