El Índice de Precios de Consumo (IPC) bajó cuatro décimas en noviembre respecto al mes anterior, mientras que y la tasa interanual cayó 1,2 puntos, hasta situarse en el 2,4%, según los datos hechos públicos hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La fuerte desaceleración del IPC, que está en línea con las previsiones del Gobierno, se ha producido básicamente por el brusco descenso del precio del petróleo.
La tasa del 2,4% es la más baja desde agosto de 2007, cuando la inflación alcanzó el 2,2%. En noviembre, los precios descendieron en términos interanuales por cuarto mes consecutivo, tras una escalada que les llevó a alcanzar en julio el 5,3%. Desde entonces, este indicador ha caído 2,9 puntos, en línea con la tendencia a la baja del precio del petróleo y el abaratamiento de algunos alimentos.
El IPC subyacente, en el que no se tienen en cuenta los precios de la energía ni de los alimentos, subió un 0,3% en el mes y la tasa interanual cayó dos décimas hasta el 2,7%, en línea con las previsiones del mercado.
