Un juez brasileño desestimó los cargos por negligencia contra dos pilotos estadounidenses que habían sido acusados por sus presuntos vínculos con el segundo peor desastre aéreo de Brasil, cuando su avión jet ejecutivo chocó en pleno vuelo con una aeronave comercial en 2006 y provocó la muerte de los 154 pasajeros.
El Boeing 737 de la aerolínea Gol terminó cayendo en una zona selvática desde una altitud de 11.300 metros, mientras el jet Legacy, propiedad la empresa ExcelAire, logró realizar un aterrizaje de emergencia en un aeropuerto. El magistrado Murillo Mendes absolvió de los cargos de negligencia a los dos pilotos, Joseph Lepore y Jan Paul Paladino, que viajaban en esta última nave, ya que trataron de comunicarse con la torre de control.
No obstante, los dos estadounidenses aún deben responder por el cargo de poner en riesgo la seguridad aérea a causa de un plan de vuelo defectuoso y de desactivar un mecanismo que podría haber evitado la colisión, según explicó el tribunal y el abogado de la defensa.