El ministro de Exteriores indio, Pranab Mukherjee, ha acusado a Pakistán de filtrar una historia sobre una persona que, haciéndose pasar por él, llamó al presidente paquistaní, Asif Ali Zardari, para amenazarle, dos días después de los atentados de Bombay.
Nueva Delhi ha culpado de los atentados que costaron la vida a 171 personas en la capital financiera de India a los milicianos paquistaníes, haciendo peligrar así la mejora de las relaciones entre los dos rivales nucleares asiáticos tradicionales.
Ayer, sábado, el periódico paquistaní Dawn informó de que Pakistán puso en alerta a sus fuerzas, después de que el bromista hablara con Zardari el 28 de noviembre.