Varios gobernadores estadounidenses pidieron hoy al presidente electo, Barack Obama, que destine dinero a infraestructuras y ayudas a los pobres ya que la crisis económica está afectando duramente a los presupuestos de los estados.
Obama, que llegará al poder el próximo 20 de enero, prometió tener en cuenta a los estados en sus planes para enfrentarse a la recesión de la economía estadounidense y para la creación o salvación de 2,5 millones de trabajos.
El presidente electo y su vicepresidente, Joe Biden, se reunieron con los gobernadores en Filadelfia, en su primera visita a un Estado desde su triunfo en las elecciones presidenciales del 4 de noviembre, para tratar sobre la crisis económica y sus consecuencias a nivel estatal y local. "No estoy pidiendo simplemente ayuda a los gobernadores del país para implementar el plan de recuperación económica, tengo interés en tener vuestra ayuda para redactar y dar forma a ese plan económico", afirmó el futuro mandatario en una reunión en la que se encontraba también la gobernadora de Alaska, Sarah Palin, ex candidata a la Vicepresidencia.
