El presidente de BBK, Xabier de Irala, reconoció que "no ha sido posible" la fusión con Kutxa, después del rechazo a esta operación por parte de la asamblea de la entidad guipuzcoana, y lamentó que "hemos perdido la oportunidad de crear una herramienta sin precedentes para hacer frente a la crisis y para contribuir al progreso económico de nuestro país y a su cohesión social".
Tras conocer el resultado de la votación de la asamblea de la Kutxa, De Irala manifestó que "cada uno sabe la responsabilidad que ha asumido" y, como presidente de BBK, indicó que tenía "el deber de intentarlo una vez más, pero siempre hay intereses que se oponen a lo que dicta el sentido común". "Ahora sólo nos queda seguir trabajando para enfrentarnos a la crisis de la mejor forma posible", agregó.
No obstante, el directivo de la BBK señaló que la caja vizcaína no renunciará a convertirse en "la Kutxa de referencia en Euskadi". "El proyecto de fusión era el mejor camino, pero hay otros.