Centenares de personas se han manifestado por las calles de Barcelona para protestar por los planes del constructor automovilístico japonés Nissan de suprimir 1.680 empleos en su fábrica de Barcelona.
Los sindicatos que participaron en la protesta han pedido al gobierno negociar con Nissan para impedir que lleve a cabo sus planes de despidos, anunciados el pasado 13 de octubre. Un representante de la Unión General de Trabajadores (UGT), Jordi Carmona, ha acusado a Nissan de querer "aprovechar esta situación coyuntural y hacerla estructural para despedir a trabajadores".
La policía ha estimado en 1.300 el número de manifestantes, mientras que los sindicatos han calculado que cerca de 2.000 personas participaron en la marcha del miércoles en la noche.