El Gobierno italiano distribuirá a partir de diciembre tarjetas, como las de los cajeros de los bancos, para que los más pobres obtengan descuentos en los supermercados y en los recibos de la electricidad.
Así lo anunció este jueves el ministro de Economía, Giulio Tremonti, quien informó de que los descuentos tendrán carácter retroactivo y podrán ser aplicables además a los meses de octubre y noviembre.
Los descuentos previstos para los más pobres del país serán de un total de 480 euros al año, es decir, 40 euros al mes, y se podrán efectuar en varias cadenas de distribución italianas con las que el Gobierno aún está manteniendo contactos.