El Gobierno español defendió hoy al Fondo Monetario Internacional y al Banco Mundial como el marco adecuado para acordar la necesaria reforma del sistema financiero, con independencia de que pueda haber reuniones previas de las principales potencias que faciliten esa labor.
Esta posición fue expuesta hoy en rueda de prensa por el vicepresidente económico, Pedro Solbes, quien acompaño al jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, en la primera jornada del Consejo Europeo que analiza en Bruselas las medidas adoptadas por el Eurogrupo para hacer frente a la crisis financiera internacional.
En su intervención ante el plenario, Zapatero agradeció al presidente francés, Nicolas Sarkozy, la reunión del Eurogrupo celebrada el domingo en París y consideró necesario que el Banco Central Europeo evalúe en qué medida las iniciativas adoptadas mejoran la fluidez del sistema interbancario.