El gobierno del presidente George W. Bush anunció su intención de apelar la decisión de un juez federal que ordenó la liberación en suelo estadounidense de 17 chinos musulmanes de la etnia uigur.
Los chinos estaban detenidos en Guantánamo sin cargos en su contra.
"En respuesta a la decisión de hoy (martes), vamos a interponer una apelación de urgencia" el martes por la noche ante la Corte de apelaciones de Washington, declaró el ministerio de Justicia en un comunicado.