El volumen de negocio de los brokers financieros retrocederá aproximadamente un 15% en 2009, hasta situarse en 150 millones de euros, mientras que la caída estimada para 2008 es del 42,6%, hasta 305 millones de euros, tras el estancamiento vivido en 2007, según un informe de DBK.
Estos datos contrastan con los crecimientos registrados en 2005 y 2006, cuando los brokers aumentaron sus ingresos un 40,6% y un 33,3%, respectivamente.
El informe atribuye estos descensos al rápido deterioro de la coyuntura económica, el intenso ajuste registrado en el mercado inmobiliario residencial y las restricciones crediticias aplicadas por las entidades financieras a partir del segundo semestre de 2007 explican el parón experimentado por la actividad de las empresas de intermediación.
Estas circunstancias están acentuando la rivalidad entre los brokers financieros, motivando la reorganización de la red de las grandes entidades y la desaparición de un alto número de operadores de tamaño pequeño.
