Bill Miller, gestor de fondos de Legg Mason y accionista de AIG, ha dicho que sería mejor para los accionistas y los contribuyentes estadounidenses que el gobierno redujera su participación en la compra de la aseguradora.
"El objetivo es intentar y persuadir al gobierno, mira, el problema con AIG no es un problema de solvencia", señaló Miller en una entrevista ayer con Bloomberg. "Si podemos inyectar nuevo capital, ésa es la mejor forma en la que el contribuyente se librara", señaló Miller.
Los accionistas de AIG han estado esperando a conocer todos los detalles del plan para comenzar a moverse. Algunos de ellos, entre los que se incluye el ex-CEO de AIG, Hank Greenberg, han anunciado que intentarían conseguir capital para evitar que sus participaciones se diluyeran. Miller y Legg Mason han reconocido participar en conversaciones en este sentido. "Podemos alinear nuestros intereses con el gobierno de una manera satisfactoria para ambas partes", señaló el gestor.