El beneficio neto de Heineken se incrementó un 35% en el primer semestre, gracias al impulso en sus cuentas dado por la última adquisición, Scottish & Newcastle.
En concreto, el beneficio neto alcanzó los 407 millones de euros, frente a los 302 millones de euros del mismo periodo del año anterior. Las cuentas cuentan con una carga de 60 millones de euros relacionada con el cierre de una oficina de Scottish & Newcastle. Las ventas, por su parte, aumentaron un 17%, hasta 6.410 millones de euros.
Heineken compró la cervecera inglesa el pasado mes de abril, y su aportación se incluye en los resultados desde el 1 de mayo. Los analistas consultados por Bloomberg esperaban un beneficio de 540 millones de euros.
