El Valencia y el Villarreal cerraron la primera vuelta de la Liga BBVA con sendas victorias ante Almería (3-2) y Athletic Club de Bilbao (2-0) respectivamente, mientras que el Rayo Vallecano sorprendió (0-1) a la Real Sociedad en Anoeta y el Espanyol se impuso (1-0) al Celta de Vigo gracias a un tanto de Caicedo en el minuto 90.
Cinco goles se vivieron en Mestalla en un partido que ofreció 45 minutos divertidos. En la primera parte el Almería le creó muchos problemas al equipo de Nuno Espiritu Santo. Un Valencia muy inseguro atrás y que no supo controlar las dos ventajas de las que disfrutaron en este periodo. Parejo hizo el 1-0 y Rodrigo el 2-1. En ambas ocasiones tardó muy poco Hemed en empatar. El israelí tuvo incluso el 2-3, pero su cabezazo se estrelló en el larguero y la afición 'che' despidió a los suyos con pitos.
En la segunda parte el Valencia cambió la imagen y con la entrada de Negredo asedió la portería almeriense. Los de Juan Ignacio Martínez salieron a aguantar un valioso punto pero a falta de 10 minutos para el final el internacional español tumbó la muralla visitante. Tres puntos muy trabajados que le permiten al Valencia situarse tercero provisionalmente, con 38 puntos, empatado con el Atlético de Madrid. El Almería, pese a la buena imagen, se fue de vacío y ronda el descenso.
Por su parte, el Athletic probó de la medicina amarilla en El Madrigal. Los de Ernesto Valverde alargaron su mala racha liguera, seis jornadas sin ganar (cinco derrotas y un empate), impotentes ante un Villarreal que sigue de dulce, 15 partidos seguidos sin perder. El choque no decepcionó, con alternativas e intercambio de golpes, pero fueron los locales los que asfixiaron a los 'leones' hasta quedare con tres puntos con los que siguen de cerca los puestos 'Champions'.
La insistencia del 'submarino', con Vietto rozando el gol en varias ocasiones, terminó viendo puerta por medio de otro que está en racha, Cheryshev. Tras el paso por vestuarios, el Athletic trató de nuevo de ser agresivo, pero poco a poco se fue quedando sin argumentos ni herramientas para meter mano a un Villarreal que apenas daba respiro a los de Valverde. En el 83', Bruno Soriano sentenció desde el punto de penalti.