El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, fue increpado hoy durante un discurso con motivo de la celebración del 4 de julio por personas que lo acusaron de ser un "criminal de guerra".
Unas seis personas interrumpieron su intervención en la casa de Thomas Jefferson, el autor principal de la Declaración de Independencia de EEUU, en Monticello (Virginia).
"!Criminal de guerra!", gritó una mujer, mientras la policía la retiraba de entre la audiencia de unas 3.000 personas, sentadas en el jardín de la mansión.