Azotado al igual que otros sectores por la debilidad de la economía, el mundo de los periódicos en Estados Unidos sufrió uno de los peores reajustes en su historia. Media decena de diarios dijeron que recortarán sus nóminas, uno dijo que encargaría a otros todo el proceso de imprenta y el Tribune Co., una de las principales editoriales de periódicos, dijo que pudiera vender su famosa torre en Chicago y el edificio que es la sede de Los Angeles Times.