
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijo en un confusa comparecencia, que el Ejército continuará la operación en Gaza "hasta conseguir los objetivos" y que reorganizará sus fuerzas en la franja "de acuerdo a las necesidades de seguridad" de Israel.
En una intervención televisada en la sede del Ministerio de Defensa, en Tel Aviv, Netanyahu agregó que su gobierno no abandona la operación militar que lanzó el 8 de julio pero que "después de completar la destrucción de túneles", se guiará "exclusivamente" de acuerdo a principios de seguridad, lo que ha sido interpretado como un próximo repliegue de fuerzas.
"No voy a decir cuándo terminaremos y adónde iremos, no tenemos ningún compromiso más allá de nuestros intereses de seguridad", afirmó el primer ministro en una comparecencia junto al titular de Defensa, Moshé Yaalón, y en la que insistió que hasta que la población israelí no tenga "calma" no cesará la ofensiva.
"Prometimos que devolveríamos la calma a la población israelí, no importa cuánto tiempo se necesite ni qué medios debamos emplear", subrayó sin hacer un anuncio claro sobre si sus fuerzas se retirarán de la Franja en los próximos días o sobre si enviará una delegación a El Cairo para negociar un alto el fuego con el movimiento islamista palestino Hamás.
Los principales comentaristas locales no se ponían de acuerdo esta noche al interpretar el mensaje del primer ministro, pero todos coincidían en que se trata de una nueva fase, de una reducción de las actividades ofensivas hasta ver cómo evoluciona la situación.
En ese sentido Netanyahu precisó que "nos desplegaremos en aquellos lugares que nos sean cómodos para reducir el riesgo de los soldados".
Las fuerzas blindadas y de infantería israelíes, que estas últimas dos semanas han estado dentro de zonas urbanas en la franja, lo que les ha causado decenas de bajas, comenzaron a replegarse por la tarde hasta tomar posiciones junto a la frontera, pero aún del lado palestino.
Sólo en la zona de Rafah, en el sur de la franja junto a la frontera con Egipto y donde buscan a un soldado desaparecido el viernes al que Israel da por capturado, era notoria aún una fuerte presencia militar israelí.