American Airlines realizará este año un recorte en su capacidad en los vuelos domésticos entre un 11% y un 12%, lo que supone una de las mayores reducciones entre las aerolíneas estadounidense desde los ataques del 11 de septiembre de 2001. Concretamente, la compañía prescindirá de 85 aviones de su flota, compuesta en la actualidad por 960 aparatos, entre American Airlines y su subsidiaria American Eagle, según señala hoy el diario The New York Times. La compañía admitió que tendrá que eliminar "algunos puestos de trabajo", sin concretar el número.
