El Santander Totta, filial portuguesa del grupo Santander, se ha apuntado también a la emisión de cédulas hipotecarias como vía para obtener liquidez e intentará colocar estos productos entre inversores, por un importe inicial previsto de 1.000 millones de euros a un plazo de tres años. Concretamente, la entidad ha abierto hoy el libro de órdenes y la operación podría cerrarse a lo largo del día a un precio de diferencial de 40 puntos básicos más el Euríbor. Según precisó el consejero delegado de la entidad, Alfredo Sáenz, la decisión de acudir a dichos mercados mayoristas responde en parte a la responsabilidad del primer banco español de "romper el hielo" y abrir la financiación de cara a la normalización de los mercados. Esta operación se suma a otras realizadas recientemente por el grupo presidido por Emilio Botín en diversos mercados mayoristas, con la colocación de unos 4.000 millones de euros en bonos.
