Los inventarios de petróleo durante la semana pasada en Estados Unidos cayeron un 0,5% (1,8 millones de barriles), hasta un total de 333,7 millones de barriles. Esta caída es superior a laa prevista por los analistas consultados por Bloomberg. Por su parte, las reservas de gasolina registraron un leve descenso de 0,1 millones de barriles, hasta 210,9 millones, mientras que las de crudo refinado aumentaron un 0,5% (0,7 millones de barriles), hasta situarse en 132,6 millones.