
Kosovo conmemora este domingo el 5º aniversario de la proclamación de su independencia de Serbia.
Pese a que las autoridades serbias todavía consideran a Kosovo como parte de su territorio, en los últimos tiempos han adoptado una posición más pragmática, ya que aspiran a entrar en la Unión Europea.
Ello queda demostrado en los encuentros periódicos que han mantenido los primeros ministros de Serbia y Kosovo en tiempos recientes.
Un Estado pobre y corrupto
Cinco años después de declarar su independencia, Kosovo es un Estado con elevadas tasas de pobreza y desempleo, graves problemas de corrupción y un conflicto étnico sin resolver entre la mayoría albanesa y la minoría serbia.
Países como Rusia y España todavía no han reconocido a Kosovo como un Estado Soberano.