Seis importantes empresas de Japón, entre las que se encuentran Toshiba o Hitachi Zosen, planean invertir en los próximos diez años hasta 120.000 millones de yenes (1.217 millones de euros) en un proyecto de energía eólica marina, según informó el diario Nikkei.
Con la sinergia, en la que también participan las corporaciones JFE Steel, Sumimoto Electric, Toa y Toyo Construction, prevén construir turbinas de viento en alta mar para producir hasta 300.000 kilovatios de electricidad.
Además, la Asociación Japonesa de Meteorología participará en el proyecto y se ocupará de los estudios de viento, mientras que Toshiba fabricará las turbinas; Hitachi Zosen, los enormes pilares de los molinos, y Suimoto Electric, el cableado submarino, detalló Nikkei.
En una primera etapa, las empresas prevén construir para 2015 una instalación piloto con capacidad generar 7.000 kilovatios con la que esperan analizar variables como el viento, la corrosión producida por la sal marina o la rentabilidad.
Tras ese primer paso, se estima que el parque esté a pleno rendimiento en 2020, una vez que las empresas participantes decidan su localización final, que podría situarse en la isla de Kyushu (sur del archipiélago), al ser una zona con mucha riqueza eólica.
La energía que se genere se venderá a las eléctricas del país, muy afectadas después de que la crisis nuclear en Fukushima provocó que actualmente se encuentren activos solo dos de los 54 reactores con los que contaba Japón antes del accidente, cuando obtenía el 30% de su energía de las centrales atómicas.
El Gobierno nipón, que apoya la energía eólica en alta mar, anunció que pretende que la generada a través de este procedimiento alcance los 8,03 millones de kilovatios en 2030.