La economía estadounidense se contraerá en el segundo trimestre pero evitará una recesión este año, según un informe de UCLA Anderson Forecast, lo que ayudaría a que el año que viene la expansión retomara un ritmo normal. Y es que ante el enfriamiento de la economía el mercado laboral sólo se desacelera, pero no con tanta fuerza como para producir una recesión, de acuerdo con esta firma. "El debilitamiento del mercado laboral es totalmente consistente con nuestra proyección de hace tiempo, de un ajuste inmobiliario que principalmente está confinado al sector de las viviendas", apunta el informe.