
Dos de los candidatos perdedores en la primera ronda de las elecciones presidenciales de Egipto han pedido un recuento parcial alegando que se han producido irregularidades.
Un oficial de policía acusó a varios de sus compañeros de repartir a 900 soldados documentos de identificación en los que no se especificaba su profesión, para que así pudieran votar, ya que los militares egipcios no pueden participar en las elecciones.
Un portavoz del izquierdista Hamdeen Sabahi, que finalizó tercero de acuerdo con los resultados preliminares, dijo que interpondrá un recurso este domingo para que no se celebre la segunda ronda, prevista para el 16 y 17 de junio.
El excanciller Amr Moussa, que quedó quinto, instó a la fiscalía a que inicie una investigación.
De acuerdo con el resultado conocido, los dos candidatos que disputarían el balotaje serían Ahmed Shafiq, el último primer ministro de Hosni Mubarak, y Mohamed Mursi, el candidato de la Hermandad Musulmana.