El Servicio Secreto de Estados Unidos prohibió a sus agentes la ingesta de alcohol en grandes cantidades y llevar a extranjeros a los hoteles durante viajes fuera del país, en medio de un creciente escándalo por acusaciones que involucran a funcionarios y prostitutas en un incidente en Colombia este mes.
Las nuevas reglas de conducta divulgadas el viernes también prohíben visitar "lugares de dudosa reputación", presumiblemente clubes de estriptís, y afirman que los empleados deben cumplir con las leyes estadounidenses aunque se encuentren en el exterior.
Una copia del reglamente por el Servicio Secreto y un portavoz dijo que tenían efecto inmediato.
Las nuevas normas fueron emitidas dos semanas después de que estallara un escándalo sobre acusaciones de que agentes del Servicio Secreto y personal militar llevaron hasta 21 prostitutas a su hotel en la ciudad colombiana de Cartagena, antes de que el presidente Barack Obama llegara a la localidad para participar de una cumbre.
Esta semana, el Servicio Secreto comenzó a investigar acusaciones de hechos similares antes de un viaje del presidente a El Salvador en el 2011. El nuevo reglamento dice que "extranjeros, salvo el personal del hotel y funcionarios oficiales, están prohibidos en la habitación del hotel".
"Solo se podrá consumir alcohol en cantidades moderadas cuando no se esté trabajando en una misión (temporal), y el uso del alcohol está prohibido dentro de las 10 horas previas a presentarse a trabajar", dicen las reglas.
Además, el alcohol está prohibido por completo en el hotel donde se hospede la persona a la que el Servicio debe proteger desde el momento de su llegada.
De ahora en adelante, un funcionario de la sección de responsabilidad profesional de la agencia viajará con los empleados y les informará reglas éticas antes de partir, dice el reglamento.
Doce agentes del Servicio Secreto estuvieron involucrados en el incidente en Colombia.
Ocho ya han dejado la agencia, a tres se les absolvió de los cargos de mala conducta y a uno se le revocará su autorización de seguridad.
Doce militares también están relacionados con el escándalo y son investigados.
El representante republicano Peter King, presidente del Comité de Seguridad Nacional de la Cámara, dijo que "probablemente enviará en las próximas semanas" investigadores a Colombia como parte de la pesquisa que lleva adelante el comité.