La división de energías renovables de la compañía canaria invertirá cerca de 40 millones de euros en la compra de terrenos y en la construcción de una fábrica de componentes fotovoltaicos en Hellín (Albacete). La planta, que comenzará a funcionar en un plazo de 18 a 24 meses, contará con un parque fotovoltaico para su autoconsumo.