El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, pidió a Cristo que le dé más vida aunque por ello deba llevar su corona de espinas, su cruz o "cien cruces" y le rogó "no me lleves todavía", en un emotivo discurso tras la celebración hoy de una misa de acción de gracias por su salud en su ciudad natal.
"Dame tu corona Cristo, dámela, que yo sangro, dame tu cruz, cien cruces, pero dame vida, porque todavía me quedan cosas por hacer por este pueblo y por esta patria, no me lleves todavía, dame tu cruz, dame tus espinas, dame tu sable que yo estoy dispuesto a llevarlas, pero con vida, Cristo mi señor", dijo Chávez.
El mandatario inició el discurso entre lágrimas y durante la misa que se celebró en su ciudad natal Barinas (oeste), retransmitida por la estatal Venezolana de Televisión, se mostró evidentemente emocionado.