El príncipe Enrique, tercero en el orden de sucesión del trono británico, llegó el viernes a Rio de Janeiro para lanzar una campaña de promoción de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, visitar una favela y jugar a rugby.
El hijo menor del príncipe Carlos y Diana, conocido como el "niño terrible" de la familia real, de 27 años, asumió su papel de diplomático en su primera gira en solitario al exterior.
Enrique estuvo en el Caribe, y realiza ahora su primera visita oficial a Brasil.
El príncipe fue acogido por el alcalde de Río de Janeiro Eduardo Paes, el gobernador del estado Sergio Cabral, así como por la escuela de samba Uniao da Ilha, que desfiló en el Carnaval de Rio de este año con el tema de Londres a Rio, ciudades que serán anfitrionas de los Juegos Olímpicos de Verano de 2012 y 2016 respectivamente.
