Newt Gingrich celebró su victoria repitiendo el ataque a ?las élites de Nueva York y Washington?, políticas y periodísticas, que tan bien le ha ido en la recta final de la campaña en Carolina del Sur. A pesar de haber sido durante años parte del establishment político de la capital estadounidense, Gingrich vino a presentarse como un ?outsider? frente al ?oficialismo? de Mitt Romney.
Pero Gingrich no solo no criticó a su rival, sino que destacó las virtudes de sus tres contrincantes, juganto la carta de la unidad que el Partido Republicano necesita para ganar a Barack Obama.
?No es que lo haga bien en los debates?, dijo en relación al buen uso que ha hecho de sus apariciones televisivas, ?sino que articulo los valores profundos del pueblo americano?.