Flash

Los alcistas están ganando la batalla

No sé si puede decirse en estos tiempos, cuando tienes la suerte de tener un empleo que te gusta, que algo relacionado con ello te atormenta.

La gente esperaba de nosotros que mostrásemos, llegado el momento, la convicción alcista que manifestamos en marzo de 2009; cuando dimos por terminada la "C de Barack" y anunciamos la llegada de una primavera a la renta variable. Primavera que nos permitió hacer una vergonzosa cantidad de dinero en poco tiempo.

Desde el principio del actual rebote alcista, que desde Ecotrader anunciamos y empezamos a trabajar en la zona de los 5.100 puntos del DAX 30 alemán, y que luego ratificábamos con más fuerza en los 2.050 del EuroStoxx 50 y los 7.800 del IBEX 35, me he devanado los sesos en torno a dos posibles escenarios de rebote: uno parecido al de marzo de 2008, interesante pero problemático finalmente para una experiencia en tendencia, y otro, por el que no me inclinaba a priori, parecido al del verano de 1998; cuando colapsó Rusia, se hundió de nuevo en la recesión Japón y quebró el Long Term Capital Management. Entonces el pesimismo nos invadió a todos. En aquellos días no supe comprar hasta que se produjo un patrón de vuelta como el que tenemos hoy. Años después, temo que no he sabido comprar con la fuerza que la ocasión merecía.

Violenta tormenta de verano

Sí, en este momento me siento más cercano a un escenario del segundo tipo: una violentísima tormenta de verano. Hace falta una jornada para corroborarlo, pero la renta variable está viviendo una vuelta mensual de esas que se ven cada pocos años, y que casi siempre anuncian un mercado alcista. Comentaba la semana pasada que la ruptura de los 1,40 en el euro/dólar y un crudo por encima de los 90 dólares debían ser motivos de preocupación para los bajistas. Pero es que a ello se pueden sumar la ruptura alcista de referencias muy ligadas al crecimiento como el kiwi/dólar, la pérdida de soporte clave en la volatilidad o la recaída de los precios de los bonos, que parecen virar definitivamente desde niveles del 2 por ciento en el T-Notes, zona que ni siquiera se superó sosteniblemente durante la guerra civil norteamericana.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky