La caja de ahorros madrilaña obtuvo un beneficio neto atribuido de 2.860,8 millones de euros en el ejercicio 2007, lo que supone un incremento del 177% respecto año anterior. Se trata del beneficio atribuido más alto de su historia apoyado en el crecimiento del negocio recurrente y en la venta de su participacion en Endesa. Sin partidas extraordinarias, el beneficio habría crecido un 40%. El margen de intermediación se elevó un 16,3%, hasta 2.248,4 millones, mientras que el margen ordinario subió un 82,5% y se situó en 5.859,8 millones. El margen de explotación, por su parte, registró un incremento del 141,3%, hasta 4.232,62 millones de euros.