Los Veintisiete debatirán por primera vez este jueves los cambios en la Política Agraria Común (PAC) que propone Bruselas a partir de 2014, tales como repartir de manera "más justa y equilibrada" las ayudas directas fijando un pago básico unitario --algo que España ha tildado ya de "disparate"-- y condicionar parte del pago a esfuerzos medioambientales.
La mayoría de países han mostrado hasta ahora sus reservas al documento por distintos motivos y los ministros de Agricultura europeos tendrán ocasión de presentar las primeras posiciones formales este jueves en Luxemburgo. Se trata del arranque de unas negociaciones que se auguran largas entre gobiernos y con la Eurocámara en el próximo año y medio.
La ministra española, Rosa Aguilar, ya dejó claro esta semana, tras una reunión con las comunidades autónomas, que España rechaza de plano la propuesta y que planteará al comisario responsable, el rumano Dacian Ciolos, que la retire. Además considera insuficiente el gasto agrícola que Bruselas prevé para el próximo periodo, y que se reduciría de un 39% a un 33% del presupuesto total de la UE entre 2014 y 2020.