La banca española redujo su exposición en el segundo trimestre de 2011 a la deuda griega, francesa e irlandesa, según los últimos datos del Banco Internacional de Pagos (BIS), que recogen que en cambio se mantuvo prácticamente idéntica en este periodo en el caso de Portugal y aumentó en el Italia.
En concreto, la exposición de la banca española a Grecia disminuyó un 3,3%, hasta los 1.223 millones de dólares (889 millones de euros), mientras que en el caso de la deuda irlandesa se redujo un 8,4%, hasta los 10.116 millones de dólares (7.353 millones de euros), y en el de la deuda francesa un 11,4%, hasta los 32.075 millones de dólares (23.316 millones de euros).
Por el contrario, la exposición a la deuda italiana había aumentado a finales del mes de junio de 2011 en comparación con el mes de marzo un 8,4%, hasta 38.203 millones de dólares (27.774 millones de euros).