El Gobierno interino de Egipto ha convocado una reunión de emergencia para este lunes a raíz de los enfrentamientos entre cristianos coptos y fuerzas de seguridad que se han producido en la tarde del domingo en El Cairo, en los que al menos 23 personas han muerto y 150 han resultado heridas.
"Lo más importante ahora es contener la situación, ver cómo podemos seguir adelante y adoptar las medidas necesarias para evitar cualquier ramificación de la violencia", ha dicho el portavoz del régimen, Mohamed Hegazy.
El Gobierno también ha advertido de que esta violencia está encaminada a empañar las elecciones legislativas que comenzarán el próximo 28 de noviembre y que se desarrollarán en tres fases, las primeras tras la caída del régimen presidido por Hosni Mubarak.
"No permitiremos que ningún grupo manipule la cuestión de la unidad nacional de Egipto o retrase el proceso de transformación democrática", recoge el comunicado divulgado por las autoridades interinas.