Líderes dnemócratas y republicanos de la Cámara de Representantes han instado a la empresa española Repsol a que abandone sus planes de exploració de petróleo en aguas de Cuba porque ello podría acarrearle acciones judiciales en Estados Unidos.
En una carta enviada al presidente de la empresa petrolera Repsol, Antonio Brufau Niubó, 34 legisladores de la Cámara Baja señalaron que cualquier operación de exploración que realice la empresa en aguas cubanas "proveerá un beneficio financiero directo a la dictadura de Castro".
Según los legisladores, "es de conocimiento común que cualquier inversión extranjera en Cuba requiere una propiedad conjunta y compensación fiscal para el régimen de La Habana".