El presidente del PP, Mariano Rajoy, está convencido de que "saldremos adelante", de que España depende de sí misma para afrontar la negativa situación económica y asegura que basará su gestión al frente del Gobierno, si gana las elecciones generales del 20-N, en hacer "una política ordenada" explicada muy bien a la gente.
En su opinión lo que ha fallado no es el sistema, sino los gobernantes que "no controlaron las cuentas públicas ni hicieron las reformas que requería la aplicación del euro" y en consecuencia "no se ha evitado el endeudamiento exagerado del sector privado y ahora hay que devolver ese dinero".
El político popular se define "partidario" del modelo que diseñó la Constitución de 1978 y dice no estar para hacer revoluciones, tras lo que afirma que "el Estado autonómico ha sido muy útil y eficaz para ordenar la convivencia, contribuir al bienestar general y reconocer los hechos diferenciales".
Rajoy señala que debemos recuperar principios y valores como el esfuerzo, el valor del trabajo, la justicia, el respeto y, "si me lo permite, aunque suene arcaico: la buena educación".
Cuestionado sobre la trama Gürtel el presidente del PP se muestra respetuoso con las decisiones de la Justicia porque "este es un principio básico de la democracia que la gente tiende a olvidar".
Al respecto del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y de su gestión política afirma que "el problema es que se ha equivocado de cabo a rabo en asuntos muy importantes y que no quiso escuchar".